Educando la empatía

En una sociedad tan compleja emocionalmente como la nuestra, resulta imprescindible desarrollar la capacidad empática para aumentar y mejorar nuestras habilidades sociales. Solo colocándote en el lugar del otro puedes intentar comprender sus actos y decisiones.

Afortunadamente, el mundo no se dibuja en blancos o negros, sino en gamas de color. Si desarrollamos la empatía, esa paleta de colores es cada vez más variada y rica.

Me propongo, como docente, educar desde el corazón, y éste es un músculo complejo que nos da las mayores alegrías o las mayores penas, por eso hay que formarlo, acunarlo dulcemente, fortalecerlo y

prepararlo para entregas sin acuse de recibo.

En el siguiente trabajo nos proponemos situarnos en el lugar de Axel e identificar sus sentimientos

frente al micromundo humano que le envuelve: su tío Otto y su novia Graüben.

Axel es el narrador de esta aventura, y a través de sus descripciones se perciben emociones que viajan en su interior y que nosotros nos proponemos identificar.

Después de leer con el corazón, hacemos un listado de posibles emociones que inundaron el de Axel antes de iniciar su intrépido viaje.

¿Qué siente Axel?

Los alumnos describen emociones que viajan por el interior de dos de sus personajes: Axel y Graüben.

El mundo de Axel.